lunes, diciembre 19, 2005

Sin motivo aparente, missing


Sin motivo aparente se ha posicionado un bote de leche entre mi cuerpo de sepia y mi zumo de naranja. No he podido desayunar, claro está. Era un bote de leche deficiente como ya he dicho, puesto que adolecía de motivo aparente así como algunas leches adolecen de nata. Me pregunto qué tipo de vaca es la que se presta a semejante aberración. Pensando que mi vida es un filme transparente de esos americanos, he buscado la foto que se sitúa sobre el rótulo missing. ¿Todos los niños desaparecidos se apellidan missing? Qué clase de familia constituyen, por dios...

Rogamos una piadosa oración por la memoria de las gambas que mi madre puso anoche en la ensalada. Amén.